“Doctor, tengo mal aliento porque mi boca es amarga”.
OK.
Vamos por partes.
Esto es muy interesante.
El mal aliento se define como un olor desagradable que es emanado por una persona y percibido por otra.
Sí. Un olor.
Es decir, los olores son percibidos por el sentido del olfato, y los sabores por el sentido del gusto, sin embargo…
¿Por qué los pacientes relacionan el mal aliento con un mal sabor en la boca?
Sucede que el gusto y el olfato trabajan juntos para percibir la comida.
Para distinguir la mayoría de los sabores, el cerebro necesita información tanto sobre del olfato como del gusto.
Estas sensaciones se comunican al cerebro desde la nariz y la boca.
Varias áreas del cerebro integran la información, lo que permite a las personas reconocer y apreciar los sabores.
Lo que consideramos el “sabor” de nuestra comida es en realidad una combinación de todos estos sentidos trabajando juntos.
El gusto depende en gran medida del olfato, por lo que sin la capacidad de oler, toda comida y bebida solo puede percibirse como uno de esos cinco sabores básicos, sin otra diferenciación posible.
Por otro lado, la relación entre estos sentidos es tan estrecha que si una persona percibe un sabor, casi en automático, relaciona este con la presencia de algún olor, asumimos que ello es lo “normal”, lo “cotidiano”, “que debe ser así”.
Lo anterior conlleva que ante la presencia de un mal sabor en boca asumamos que existe mal aliento, no obstante eso no siempre es así.
Pero…
¿Por qué se produce el mal sabor de boca o boca amarga?
Mi superpaciente es importante que sepas que existen una serie de alteraciones de la percepción del gusto y el olfato.
Esta vez, te contaré sobre las alteraciones o trastornos del gusto.
Existen 3 principales, siendo la tercera la que más se relaciona al mal aliento.
Las alteraciones o trastornos del gusto incluyen:
- La hipogeusia, un trastorno en el que la capacidad gustativa se reduce.
- La ageusia, un trastorno en el que la persona pierde por completo el gusto.
- La disgeusia, un trastorno en el que hay un mal sabor persistente en la boca. Dicho sabor puede ser salado, rancio o metálico.
¿Cómo se diagnostican las alteraciones o trastornos del gusto?
El médico especialista en otorrinolaringología es el profesional encargado de diagnosticar los problemas en el sentido del gusto.
Para evaluar la gravedad del trastorno, este especialista emplea pruebas específicas de sabor que determinan la concentración más baja de una característica de sabor que el paciente pueda detectar y reconocer.
Dichas pruebas pueden incluir la degustación y descripción de sustancias tras ser probadas y escupidas, así como la aplicación directa de químicos en la lengua.
También se podría requerir al paciente que compare los sabores de diversas sustancias o describa las diferencias entre diferentes concentraciones de características de sabor.
¿Qué causa el mal sabor de boca o boca amarga?
Existen una serie de factores locales y sistémicos que pueden producir este fenómeno.
Entre los factores locales se tiene a:
La saliva.
Las modificaciones en la saliva representan un desafío para el contacto de las sustancias con los receptores de las papilas gustativas, al mismo tiempo que afectan los mecanismos de transducción, que es el proceso mediante el cual una célula convierte un tipo de señal o estímulo en otro.
Estas alteraciones también interfieren en la preservación de la integridad de los botones gustativos.
Los cambios pueden manifestarse de manera cuantitativa, es decir, en la producción de la cantidad de saliva o reducción del flujo salival, o cualitativa, en las variaciones de viscosidad o composición salival. (la conocida sequedad bucal)
Un porcentaje importante de las personas con disgeusia reportan sequedad bucal, aunque no siempre se confirma objetivamente una hiposalivación.
Este hecho puede explicar por qué la sensación de boca seca comienza con mensajes sensoriales de los receptores gustativos.
En muchos casos, aquellos pacientes que creen padecer halitosis solo experimentan boca seca.
¿Te preocupa el mal aliento?
Biofilm
Es una comunidad microbiana compleja que se forma en la superficie de los dientes, encías y otras partes del organismo.
Un biofilm es una red compleja de interacción de las bacterias, la cual les da mayores propiedades patogénicas y de resistencia.
El biofilm que suele relacionarse a la boca amarga y mal aliento no es el que comúnmente se relaciona con la caries dental.
Es el biofilm que nos preocupa es aquel que ocupa otras partes de la cavidad bucal, sobre todo aquellas superficies donde la mayoría de personas no suele limpiar,
Saburra lingual.
La saburra lingual es una acumulación de bacterias, células muertas, restos de comida y otros desechos en la lengua, especialmente en su parte posterior.
Esta acumulación forma una capa blanquecina o amarillenta, que puede variar en grosor y apariencia.
Tanto el biolfim como la saburra lingual son importantes porque hay indicios de que el desarrollo y acumulación de biolfims complejos podrían tener relación con la activación de receptores del sabor, específicamente el sabor amargo.
Biofilm periodontal.
Si bien los pacientes que tienen mal aliento, no necesariamente van a tener una enfermedad severa de encías, es bien sabido, desde hace mucho tiempo, que los pacientes con estas enfermedades tienen un mayor riesgo de sufrir de mal aliento.
Las enfermedades de encías se producen por la mala higiene que favorece la acumulación de bacterias, restos de células, minerales, etc.
Las enfermedades de encías suele iniciar con una gingivitis, si estas no se tratan podrían progresar a una periodontitis con el riesgo de la pérdida de dientes.
Esto se debe a que esta enfermedad se produce por bacterias que generan los famosos compuestos sulfurados volátiles coma los cuales se caracterizan por ese olor desagradable.
Ojo, estas bacterias no son las mismas que las que generan la caries dental. Se trata de un tipo totalmente diferente.
Estos microorganismos generan cuadros inflamatorios que producen cambio de color, sangrado y ese característico sabor metálico en la boca.
Caseum amígdalino (tonsilolitos).
La presencia de caseos amigdalinos, también conocidos como tonsilolitos en las criptas amigdalianas pueden generar un olor desagradable que se puede asociar a un sabor.
Varias investigaciones científicas sugieren que las amígdalas, los dientes y las encías son colonizadas por las bacterias presentes en el biofilm lingual, principalmente las que provienen del dorso posterior.
Otros factores bucales que pueden causar boca amarga
Lesiones de la lengua provocadas por traumas, infecciones virales, infecciones por hongos o carencias de vitaminas también pueden generar alteraciones sensoriales.
La presencia de prótesis dentales que no son fácilmente higienizadas, el uso de enjuagues bucales, pastas o cremas dentales que terminan siendo agresivas para la cavidad bucal del paciente pueden generar este problema.
El uso de clorhexidina, un antiséptico muy conocido, puede llevar a la reducción del gusto, especialmente a los sabores salados y amargos.
Por otro lado, las pastas dentales con lauril sulfato de sodio.
Entre los factores sistémicos que pueden causar la boca amarga se tiene al reflujo gastroesofágico, problemas del esófago, entre otros.
Estos factores serán desarrollados en una próxima publicación.
¿Cuál es el tratamiento del sabor amargo en la boca?
En cuanto al tratamiento, este variará según la causa subyacente del trastorno del gusto.
Muchas veces un remedio casero es más que suficiente para combatir este problema, sin embargo, todo depende de la causa que lo origina.
En los casos que el origen esté relacionado con algún medicamento, el médico puede sugerir interrumpir su uso o cambiar a otro fármaco similar que no afecte el sentido del gusto de manera significativa.
En el caso de que la causa sea una enfermedad, el médico procederá a tratar la enfermedad en sí o derivará al paciente a otro especialista que pueda encargarse de ello.
Es relevante destacar que algunas personas con trastornos del gusto pueden recuperar su sentido del gusto de manera espontánea, sin necesidad de tratamiento alguno.
Recuerda que siempre es importante consultar al médico o dentista para descartar los orígenes del problema, siendo el segundo la primera cita a agendar.
Consejos para combatir en sabor amargo en la boca
1. Mantenga una buena higiene bucal: Cepillarse los dientes dos veces al día y usar hilo dental diariamente puede ayudar a eliminar bacterias y partículas de alimentos que pueden causar un sabor amargo en la boca.
2. Manténgase hidratado: Beber mucha agua puede ayudar a eliminar toxinas y bacterias que pueden causar un sabor amargo en la boca.
3. Evita los alimentos que pueden provocar un sabor amargo: Ciertos alimentos y bebidas, como el café, el alcohol y las comidas picantes o ácidas, pueden provocar un sabor amargo en la boca. Evitar estos alimentos puede ayudar a reducir el sabor amargo.
4. Ten una dieta variada.
5. Consulta con un especialista o experto que te oriente.
Dale clic en la imagen y mira el video de mi canal de Youtube donde hablo de la boca amarga y el mal aliento.
Espero que este contenido sea de utilidad para ti.
Un fuerte abrazo mi superpaciente.
Soy el Dr. Juan Francisco Ceccarelli, también conocido como el Dr. Encías
Clínica de Encías | Mal aliento e Implantes Dentales Lima
Jirón Monterrey N° 355, Lima 15038
Santiago de Surco – Lima – Perú
Teléfono / WhatsApp: +51 992 220 516
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Referencias bibliográficas
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Smell and Taste Disorders [Internet]. Otolaryngology — Head & Neck Surgery. [citado el 1 de enero de 2024]. Disponible en: https://med.stanford.edu/ohns/OHNS-healthcare/sinuscenter/resources/patient_guides/smell-taste-disorders.html?tab=proxy
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